UNA ESPAÑA SIN RUBALCABA

Tras los últimos avatares en la salud del vicepresidente primero del Gobierno y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, muchos han empezado a hacer quinielas sobre el futuro del Gobierno y la continuidad de Zapatero.

Alfredo Pérez Rubalcaba, durante una rueda de prensa. Foto: Moncloa

Hasta el momento, la clase política ya no se debatía entre si José Luis Rodríguez Zapatero seguiría en el poder, sino quién sería su delfín o sustituto. Rubalcaba siempre ha sido la primera opción en todas las quinielas pero con su posible desaparición de la escena pública se abre la veda.

En las apuestas, muchos nombres. El primero de ellos, el actual presidente del Congreso de los Diputados, José Bono, quien ya se jugó el puesto con Zapatero en las primarias que dieron a este último la secretaría del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) en el año 2000. Un candidato que gusta tanto a gente de derechas como de izquierdas.

José Bono, durante la jornada de puertas abiertas del Congreso de los Diputados. Foto: Institucional

El siguiente sería José Blanco, sucesor natural de Zapatero al ser vicesecretario del PSOE. En la actualidad, ocupa la cartera de Fomento y ha conseguido gran popularidad tras los sucesos del pasado puente de diciembre con la huelga de los controladores aéreos.

Por otro lado, una mujer. Carmen Chacón, primera fémina en dirigir los designios de la cúpula militar. Un golpe de efecto ante muchos ojos, ya que es una mujer que ha sabido defender la cartera de Defensa  ante las críticas más rancias y además se maneja muy bien en la política de las dos grandes ciudades de España, Madrid y Barcelona.

Carmen Chacón, durante el reconocimiento al General Manuel Gutiérrez Mellado. Foto: Ministerio de Defensa

Por último, también se han escuchado voces que no dudarían en resucitar a viejas glorias como el expresidente del Gobierno, Felipe González, o el candidato a la Presidencia en las Elecciones generales del 2000, Joaquín Almunia.